Porto Belo es un destino que ofrece una combinación única de hermosas playas, rica gastronomía, historia, cultura y maravillosos paisajes naturales. Sus playas de aguas cristalinas son ideales para relajarse, disfrutar del sol y explorar la vida marina que habita en ellas. La oferta gastronómica incluye deliciosos platos de mariscos frescos y pescados, que reflejan la tradición culinaria local.
Además de sus atractivos naturales, Porto Belo también cuenta con puntos de interés cultural y pinturas rupestres que cuentan la historia de los primeros pueblos. La ciudad en sí tiene un encanto pintoresco con calles empedradas y coloridas casas coloniales que invitan a paseos tranquilos y descubrir la artesanía local.